Muy recomendado por varias personas hace tiempo, puedo afirmar, una vez leído, que tenían absoluta razón. Pocas veces se encuentra una obra tan adulta a la vez que divertida, de un realismo (dentro de lo que cabe tratándose de superhérores) que sorprende. Y lo más curioso de todo es que prácticamente es puro diálogo y aún así no aburre ni hace decaer el interés. Acompañado de un dibujo adulto y bastante espectacular, por cierto, que le imprime una fuerza al conjunto apabullante. Y es que tiene mérito crear grandes secuencias dibujadas de acción, pero aún lo tiene más hacerlo con escenas tranquilas y cotidianas.
Mark Millar y Bryan Hitch logran una obra completa de una calidad que roza la perfección, con diálogos inteligentes y grandes momentos. Una lástima que para continuarla contrataran a un nuevo equipo que, según he leído, no sólo no le llega a la suela de los zapatos a este producto, sino que parece incluso que no se están leyendo a los mismos personajes. Yo por mi parte no tengo interés en leerlo y prefiero quedarme con el recuerdo de este pedazo de cómic.
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