Cloverfield. Cuando El Cine Sorprende

Aprovechando que saldrá a la venta el próximo 18 de Junio me gustaría recordar la desafortunadamente traducida en España como Monstruoso (tema que trataré en futuro post).

En estos tiempos solemos ir al cine casi a tiro hecho. Secuelas o películas que más o menos tienen fama incluso antes de ser estrenadas. Sin embargo a veces nos metemos en una sala ver un film del que no tenemos espectativas ni opinión. Ese fue el caso de Cloverfield.

Desde un único trailer donde no se deja ver exactamente de qué va el metraje, pasando por el sorprendente realismo de sus imágenes y culminando en la escena más impactante que he visto con esa cabeza de La Estatua De La Libertad volando y cayendo en la calle. Fueron razones más que suficientes para movilizarme al cine y ver de qué iba aquello. No tenía ninguna espectativa concreta, ya que otras pelis que hicieron uso en el pasado de imágenes realistas a través de una cámara de video resultaron ser luego bastante decepcionantes. La Bruja De Blair por ejemplo.

La sorpresa fue mayúscula. Una peli de monstruo gigante atacando la ciudad, pero no una cualquiera. Para mí resultó la mejor vista jamás. Su primera ventaja en que no se vea al bicho claramente hasta el final y las demás son el enfoque primera persona que te hace vivirlo con una intensidad equivalente a estar allí, los efectos especiales más que correctos, ese primer acto con la fiesta de despedida de uno de los protagonistas que consigue dar sensación de seguridad y normalidad con el consecuente efecto de agobio cuando comienza la verdadera "fiesta". Quizás otra de sus ventajas sea el 11S, pues vemos edificios destrozados y papeles volando por todas partes igual que ocurrió aquel fatídico día, confiriéndole otro toque de realismo al compararlo con la cruda realidad. Hay escenas verdaderamente agobiantes en los túneles del metro cuando a oscuras deciden poner la visión nocturna. En general mi pareja y yo estuvimos pegados al asiento en tensión todo el metraje y salimos bastante contentos de una película que en principio podía haber sido una peli más de monstruos y sin embargo fue y es un entretenimiento con mayúsculas. Algo que no ocurre, por desgracia, demasiado.

Parece que habrá segunda parte, aprovechando el filón, cosa que como dice mi amigo Daniel (http://www.danieldandefensor.blogspot.com/) no debería ser el motivo de una secuela. Por lo menos esperemos que se pueda ver, aunque no llegue a ser mejor que su predecesora.