SUPERMAN/BATMAN. LOS MEJORES DEL MUNDO de DAVE GIBBONS, STEVE RUDE, ETC. // EL REGRESO DEL CABALLERO OSCURO de FRANK MILLER, ETC.

Los Mejores del Mundo es una historia que ya había leído a medias. Tenía, o mejor dicho aún tengo, los dos primeros números y siempre me faltó el tercero que no logré encontrar nunca. Ahora gracias a estas reediciones de lujo, he podido completarlo.

La verdad es que siempre me gustó esta historia principalmente porque juntaba a los dos pesos pesados de DC, pero también por su dibujo excepcional (al menos para mí) y la historia. Esta última no es nada del otro mundo, pero si la analizas con detenimiento encontrarás que tampoco es tan sencilla como aparenta. Más divertido e interesante que el encuentro entre Super y Bats, es el choque entre Lex y Joker. Los dos son psicópatas, pero uno de ellos tiene una obsesión por aparentar lo contrario como hombre de negocios y al otro le da igual, sabe que está loco y le gusta disfrutarlo sin importar las consecuencias. Los turbios negocios que les lleva a tratarse se convertirán en una excusa perfecta para cada cual visitar al ciudad del otro, poniéndola patas arriba. El Joker sumirá Metrópolis en un caos de "risas" y pondrá en evidencia a Superman, mientras que Luthor comenzará a comprar media Gotham y hará pasar un mal rato a Batman. De trasfondo habrá una historia sobre un orfanato fundado para acoger a niños de las dos ciudades.

El Regreso del Caballero Oscuro nunca lo había leído, como tantas otras obras denominadas maestras. Sin embargo yo siempre me alegro, porque si no las leí en su tiempo fue por no tener recursos monetarios para comprarlos y ahora con las reediciones puedo hacerlo, teniendo además una mentalidad adulta. Sí, sé que están colgados por la red y cualquiera puede leerlos, pero no me gusta hacerlo en una pantalla de ordenador. Aparte de que cansa, a mí me gusta tener el objeto físico en las manos, poder olerlo, sentirlo, pasar las páginas y llevármelo a cualquier parte de la casa o lugar. Para muchas cosas la era digital es un invento útil, pero a mí nadie me quita de tener un buen libro o cómic entre las manos. Al menos no mientras existan.

Como decía no había leído la subsodicha obra maestra. Como me pasó con Watchmen (que leí por primera vez a finales del año pasado, aprovechando el tirón de la peli y la oportuna reedición) no me ha parecido para tanto. Yo lo achaco a que tantos años oyendo a la gente decirte lo buenísima obra que es tal o cual cómic, hace que tus expectativas sean demasiado altas. Posiblemente la tan criticada secuela El Contraataque del Caballero Oscuro me parecerá mejor cuando la lea, no porque lo sea, sino porque mis espectativas hacia el producto son más bajas. No me entendáis mal, me encantó "El Regreso", he disfrutado como un niño página por página. Me ha resultado un futuro perturbador, hijo de la época en que fue escrito. Que Gotham esté peor que nunca y un Bruce Wayne cincuentón decida regresar a dar leña resulta superinteresante, además no lo motiva tanto el que su ciudad esté fatal como el hecho de que su verdadero yo clama por salir de su confinamiento. Me parece brillante como se muestra a los medios de comunicación, quitándole hierro a todo lo que es grave y fomentando el espectáculo y el sensacionalismo (qué visionario el Frank Miller). EEUU es un caos presidido aún por Ronald Reagan, convertido en un fantoche con trajes horteras y que tiene a su lado al mismísimo Superman, convertido en instrumento político y militar. Aparte de que no entiendo bien qué lleva a Bruce a aceptar al nuevo Robin, una niña de 13 años, si quedó tan traumatizado con la muerte de Jason. Sí, se da a entender que los tiempos lo requieren por la gravedad del estado de Gotham, pero a mí me pareció más bien un acto egoísta de Wayne. Una manera de no sentirse solo o de rememorar viejos tiempos. Aparte he notado ciertas connotaciones sexuales sutiles que parecen crearse entre ambos, puede que yo tenga le mente enferma, pero la secuencia en que Bruce está medio desnudo con el brazo en cabestrillo y Robin se le abraza me resultó más sexual que cariñosa. O quizás una mezcla de ambas cosas. (No sé, igual tengo que dejar de ver porno. Jajajajajajajaja.). En unos tiempos tan oscuros y extraños, era de esperar que las diferencias entre Batman y Superman los llevase a una pelea final aprovechando que el Hombre de Acero no tiene a mano toda la luz del Sol porque un artefacto nuclear modificado ha formado un invierno repentino y momentáneamente ha hecho que el Kryptoniano estuviese a punto de morir por falta de energía, consumido en la gran explosión. Un pelín rebuscado para poder enfrentarlos a ambos en una pelea más o menos igualada, aunque diferente al típico recurso de meter la kryptonita en la ecuación. El resultado final era de esperar.

En fin. Para resumir, está claro que es una obra compleja con muchos niveles de lectura e interpretación. Por eso quizás se merece la calificación de obra maestra, porque no deja indiferente a nadie y transmite miles de cosas distintas. Algo tan complejo no puede ser un cómic más, eso está claro.